|
Fuente bibliográfica:
http://www.liceodigital.com/literatura/enamorado.htm
HIMNO
Versión original del HIMNO NACIONAL MEXICANO
|
NOTA: En esta pagina encontrarás los 10 Himnos mas hermosos.No olvides escucharlos y comentarlos en clase.
http://www.taringa.net/posts/info/13554269/Los-10-himnos-nacionales-mas-hermosos-del-mundo.html
ELEGÍA
ELEGIA INTERRUMPIDA
DE OCTAVIO PAZ
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
Al primer muerto nunca lo olvidamos,
aunque muera de rayo, tan aprisa
que no alcance la cama ni los óleos.
Oigo el bastón que duda en un peldaño,
el cuerpo que se afianza en un suspiro,
la puerta que se abre, el muerto que entra.
De una puerta a morir hay poco espacio
y apenas queda tiempo de sentarse,
alzar la cara, ver la hora
y enterarse: las ocho y cuarto.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
La que murió noche tras noche
y era una larga despedida,
un tren que nunca parte, su agonía.
Codicia de la boca
al hilo de un suspiro suspendida,
ojos que no se cierran y hacen señas
y vagan de la lámpara a mis ojos,
fija mirada que se abraza a otra,
ajena, que se asfixia en el abrazo
y al fin se escapa y ve desde la orilla
cómo se hunde y pierde cuerpo el alma
y no encuentra unos ojos a que asirse...
¿Y me invitó a morir esa mirada?
Quizá morimos sólo porque nadie
quiere morirse con nosotros, nadie
quiere mirarnos a los ojos.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
Al que se fue por unas horas
y nadie sabe en qué silencio entró.
De sobremesa, cada noche,
la pausa sin color que da al vacío
o la frase sin fin que cuelga a medias
del hilo de la araña del silencio
abren un corredor para el que vuelve:
suenan sus pasos, sube, se detiene...
Y alguien entre nosotros se levanta
y cierra bien la puerta.
Pero él, allá del otro lado, insiste.
Acecha en cada hueco, en los repliegues,
vaga entre los bostezos, las afueras.
Aunque cerremos puertas, él insiste.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
Rostros perdidos en mi frente, rostros
sin ojos, ojos fijos, vaciados,
¿busco en ellos acaso mi secreto,
el dios de sangre que mi sangre mueve,
el dios de yelo, el dios que me devora?
Su silencio es espejo de mi vida,
en mi vida su muerte se prolonga:
soy el error final de sus errores.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
El pensamiento disipado, el acto
disipado, los nombres esparcidos
(lagunas, zonas nulas, hoyos
que escarba terca la memoria),
la dispersión de los encuentros,
el yo, su guiño abstracto, compartido
siempre por otro (el mismo) yo, las iras,
el deseo y sus máscaras, la víbora
enterrada, las lentas erosiones,
la espera, el miedo, el acto
y su reverso: en mí se obstinan,
piden comer el pan, la fruta, el cuerpo,
beber el agua que les fue negada.
Pero no hay agua ya, todo está seco,
no sabe el pan, la fruta amarga,
amor domesticado, masticado,
en jaulas de barrotes invisibles
mono onanista y perra amaestrada,
lo que devoras te devora,
tu víctima también es tu verdugo.
Montón de días muertos, arrugados
periódicos, y noches descorchadas
y amaneceres, corbata, nudo corredizo:
"saluda al sol, araña, no seas rencorosa..."
Es un desierto circular el mundo,
el cielo está cerrado y el infierno vacío.
Al primer muerto nunca lo olvidamos,
aunque muera de rayo, tan aprisa
que no alcance la cama ni los óleos.
Oigo el bastón que duda en un peldaño,
el cuerpo que se afianza en un suspiro,
la puerta que se abre, el muerto que entra.
De una puerta a morir hay poco espacio
y apenas queda tiempo de sentarse,
alzar la cara, ver la hora
y enterarse: las ocho y cuarto.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
La que murió noche tras noche
y era una larga despedida,
un tren que nunca parte, su agonía.
Codicia de la boca
al hilo de un suspiro suspendida,
ojos que no se cierran y hacen señas
y vagan de la lámpara a mis ojos,
fija mirada que se abraza a otra,
ajena, que se asfixia en el abrazo
y al fin se escapa y ve desde la orilla
cómo se hunde y pierde cuerpo el alma
y no encuentra unos ojos a que asirse...
¿Y me invitó a morir esa mirada?
Quizá morimos sólo porque nadie
quiere morirse con nosotros, nadie
quiere mirarnos a los ojos.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
Al que se fue por unas horas
y nadie sabe en qué silencio entró.
De sobremesa, cada noche,
la pausa sin color que da al vacío
o la frase sin fin que cuelga a medias
del hilo de la araña del silencio
abren un corredor para el que vuelve:
suenan sus pasos, sube, se detiene...
Y alguien entre nosotros se levanta
y cierra bien la puerta.
Pero él, allá del otro lado, insiste.
Acecha en cada hueco, en los repliegues,
vaga entre los bostezos, las afueras.
Aunque cerremos puertas, él insiste.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
Rostros perdidos en mi frente, rostros
sin ojos, ojos fijos, vaciados,
¿busco en ellos acaso mi secreto,
el dios de sangre que mi sangre mueve,
el dios de yelo, el dios que me devora?
Su silencio es espejo de mi vida,
en mi vida su muerte se prolonga:
soy el error final de sus errores.
Hoy recuerdo a los muertos de mi casa.
El pensamiento disipado, el acto
disipado, los nombres esparcidos
(lagunas, zonas nulas, hoyos
que escarba terca la memoria),
la dispersión de los encuentros,
el yo, su guiño abstracto, compartido
siempre por otro (el mismo) yo, las iras,
el deseo y sus máscaras, la víbora
enterrada, las lentas erosiones,
la espera, el miedo, el acto
y su reverso: en mí se obstinan,
piden comer el pan, la fruta, el cuerpo,
beber el agua que les fue negada.
Pero no hay agua ya, todo está seco,
no sabe el pan, la fruta amarga,
amor domesticado, masticado,
en jaulas de barrotes invisibles
mono onanista y perra amaestrada,
lo que devoras te devora,
tu víctima también es tu verdugo.
Montón de días muertos, arrugados
periódicos, y noches descorchadas
y amaneceres, corbata, nudo corredizo:
"saluda al sol, araña, no seas rencorosa..."
Es un desierto circular el mundo,
el cielo está cerrado y el infierno vacío.
Fuente bibliográfica.
http://www.poemas-del-alma.com/elegia-interrumpida.htm#sthash.ehP9CR9e.dpbs
Nota: Lee algunas de las elegías que se encuentran en este sitio y coméntalas de clases.
http://www.poesi.as/mh3429.htm
http://www.palabravirtual.com/index.php?ir=ver_voz1.php&wid=1105&p=Jos%E9%20Angel%20Buesa&t=Eleg%EDa%20lamentable&o=Jos%E9%20Angel%20Buesa
ODA
La oda es un subgénero lírico y una composición poética de tono elevado o cantado, que trata asuntos diversos entre los que se recoge una reflexión del poeta. Según el tema que se cante, puede ser religiosa, heroica, filosófica, amorosa. En general se aplica a todo poema destinado a ser cantado. Se utiliza también para hacer alabanzas a cualidades que poseen personas u objetos que el poeta quiere destacar positivamente.
Antiguamente se cantaba con el acompañamiento de un instrumento musical. En la Antigua Grecia donde tiene sus principios, existían dos tipos de odas: las corales y las cantadas por una sola voz (monodia). Píndaro compuso odas a los dioses, héroes y atletas. Las de Alceo de Mitilene celebraban las virtudes militares y a los guerreros y las de Safo, a los amantes y el amor; Anacreonte se sirvió de ellas para aplaudir los placeres de la mesa y del amor. Entre los latinos se desarrolló un estilo particular, en el que descolló Horacio, basado en una mezcla de los estilos de Anacreonte y Píndaro.[cita requerida]
En la poesía castellana cultivaron este género Fray Luis de León,1 Garcilaso de la Vega, Herrera, Quintana, Cienfuegos, Juan Nicasio Gallego, Espronceda, etc. y en la poesía catalana es célebre la Oda a la nació catalana, de Buenaventura Carlos Aribau.
Son famosas a su vez las odas de Ronsard, Víctor Hugo y Théodore de Banville en Francia, Abraham Cowley y John Gay en Inglaterra, Klopstock en Alemania, Manzoni y Bernardo Tasso en Italia; en Chile, las Odas Elementales de Pablo Neruda proyectan una renovación del género para toda la literatura.
Fuente bibliográfica.
http://es.wikipedia.org/wiki/OdaNota: a continuación se presentan algunos sitos que contienen este tipo de obra no olvides leerlas y comentarlas en clases.
http://pasosperdidos.eresmas.net/Gatoliter/Pablo_neruda_Oda_al_gato.htm
http://www.poemas-del-alma.com/pablo-neruda-oda-a-los-calcetines.htm#sthash.0jw0foz0.dpbs
POEMA
Poemas de Mario Benedetti
A continuación, los mejores poemas de Mario Benedetti:
- ¿De qué se ríe?
- ¿Por qué no hay más viajes a la luna?
- ¿Qué les queda a los jóvenes?
- A la izquierda del roble
- A Roque
- A tientas
- Ahora todo está claro
- Alguien
- Allende
- Amor de tarde
- Arco iris
- Artigas
- Asunción de tí
- Ausencia de Dios
- Ay del sueño
- Ayer
- Bandoneón
- Bienvenida
- Botella al mar
- Buenos días, Gabriel
- Cada ciudad puede ser otra
- Cálculo de probabilidades
- Calma chicha
- Canje
- Cero
- Certificado de existencia
- Chau número tres
- Chau pesimismo
- Che 1997
- Como árboles
- Confidencial
- Conjugaciones
- Consternados, rabiosos
- Contraofensiva
- Corazón coraza
- Cuadragésimo aniversario
- Cuando éramos niños
- Currículum
- De árbol a árbol
- Decir que no
- Defensa de la alegría
- Desaparecidos
- Desde el alma (vals)
- Desganas
- Despabílate amor
- Digamos
- Disidentes
- El infinito
- El mar
- El silencio del mar
- El soneto de rigor
- El Sur también existe
- Elegir mi paisaje
- Ella que pasa
- Empero
- En pie
- Enamorarse y no
- Entre siempre y jamás
- Epigrama
- Esa batalla
- Ese gran simulacro
- Espero
- Esta ciudad es de mentira
- Ésta es mi casa
- Estados de ánimo
- Gallos sueños
- Grietas
- Hagamos un trato
- Happy birthday
- Hasta mañana
- Heterónimos
- Historia de vampiros
- Hombre preso que mira a su hijo
- Hombre que mira al tira que lo sigue
- Hombre que mira el cielo
- Hombre que mira el techo
- Hombre que mira la luna
- Hombre que mira la tierra
- Il coure
- Informe sobre caricias
- Intimidad
- La buena tiniebla
- La culpa es de uno
- La otra copa del brindis
- La red
- La vida ese paréntesis
- Las palabras
- Las primeras miradas
- Las soledades de Babel
- Lento pero viene
- Lo que necesito de ti
- Los formales y el frío
- Lovers go home!
- Maravilla
- Marginalia
- Me sirve no me sirve
- Mejor te invento
- Memorándum
- Mucho más grave
- Mundo
- No lo harás en vano
- No te salves
- Noción de patria
- Nostalgia
- Nuevo canal interoceánico
- Oda a la mordaza
- Oda a la pacificación
- Oda al apagón
- Once
- Otro cielo
- Ovnis
- Página en blanco
- Parpadeo
- Pasatiempo
- Pausa
- Pero vengo
- Piedritas en la ventana
- Pies hermosos
- Poema frustrado
- Por qué cantamos
- Por siempre
- Preguntas al azar
- Preliminar del miedo
- Quién sabe
- Quiero creer que estoy volviendo
- Rostro de vos
- Saberte aquí
- Santo y/o seña
- Semántica práctica
- Señales
- Señas del Che
- Ser y estar
- Si Dios fuera una mujer
- Síndrome
- Sirena
- Sobrevivientes
- Soledades
- Sólo mientras tanto
- Táctica y estrategia
- Talantes
- Te acordás hermano
- Te quiero
- Teoría de conjuntos
- Teoría y práctica
- Test
- Tiempo sin tiempo
- Todavía
- Todo lo contrario
- Todo verdor
- Tormenta
- Torturador y espejo
- Transgresiones
- Triste nº1
- Trueque
- Tu espejo es un sagaz
- Última noción de Laura
- Últimas golondrinas
- Un Padrenuestro Latinoamericano
- Una mujer desnuda y en lo oscuro
- Ustedes y nosotros
- Utopías
- Vamos juntos
- Vaya uno a saber
- Viceversa
- Viento del exilio
- When you are smiling
- Yo no te pido
Lee todo en: Mario Benedetti - Poemas de Mario Benedetti http://www.poemas-del-alma.com/mario-benedetti.htm#ixzz2YCMmqPaVNOTA: Te recomiendo leer los poemas de Mario Benedetti y una infinidad de autores en la siguiente dirección.
http://www.poemas-del-alma.com/ustedes-y-nosotros.htm#sthash.6pcQVtRj.dpbs
No hay comentarios:
Publicar un comentario